viernes, 30 de diciembre de 2011

Querer ser único hace tiempo que dejó de ser algo único.

Conceptos que te pertenecen y los cantan a los cuatro vientos.
Ideas que encienden bombillas que, de pronto, parpadean.

Y es que después de todo, no somos tan originales.

Queremos ser diferentes porque así seremos mejores. Buscamos lo único, lo sobresaliente.

Ya no es mi batalla, aunque supongo que entro de nuevo en esa guerra queriendo ser única escapándome de la moda de ser única.

Yo sólo quiero comerme mañana unas buenas croquetas de la Tita, una sopa de pesacado que espero impaciente durante todo el año, unas almejitas de mamá y brindar con los míos para que haya un 2012 para todos. Y lo demás irá saliendo sobre la marcha.

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Tic, tac

Fotos que cambian de color,
semillas que llegan al cielo,
conejos que corren sin rumbo,
suspiros que acaban en beso.


Deseos que cambian de forma
y convierten la vida en un juego,
siendo el pasaporte mi nuevo tablero.

                                                                                          google.com/imágenes

Camino borrando las huellas de un dolor que ya no siento. 

Camino sin mirar atrás, dejando que llueva el tiempo.



***

martes, 13 de diciembre de 2011

VUELVE EL CALVO

Ni turrones, ni luces por la calle Princesa. Lo que me avisaba de que la Navidad había llegado era esa canción de Maurice Jarre que escuchaba desde cualquier parte de la casa y me hacia correr en busca del televisor.



Yo siempre he sido y seré pro-calvo.

Aun así tengo que reconocer que este año me gusta la campaña que la agencia Grey ha hecho para el Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad. Y es que han creado una "Fábrica de Sueños" en la calle Cervantes 42, donde niños y mayores podrán estar un poquito más cerca de aquello que tanto desean.

Todo el mundo tiene derecho a soñar, la ilusión hace el día a día más llevadero. Es posible que de la noche a la mañana te despiertes con la cartera repleta de dinero y un billete con destino al infinito, pero no es lo habitual.

Podemos escribir cartas a los Reyes Magos cada año, pero mientras esperamos a que nos llueva la suerte, mejor seguir en movimiento. Porque aunque sólo se manifieste entre diciembre y enero, la Navidad dura 365 días.

SI SUEÑAS... ¡ESPABILA!

***